En cada ciudad existen establecimientos hosteleros que necesitan poca (o ninguna) presentación. En Jaén, ”El Loco” es uno de ellos, qué duda cabe. La fama cuesta, pero una vez que la tienes, no puedes echarte a dormir, hay que mantenerla.

Líder en su zona, este restaurante (intergeneracional) mantiene a su público fiel, año tras año, a la vez que su nueva clientela se incrementa. La buenas críticas lo avalan. Queda “Loco” para rato.
Os invitamos, en esta ocasión, a conocer uno de los bares clásicos (que nunca fallan) en nuestra ciudad: “El Loco”.

Este establecimiento, que lleva liderando el sector hostelero en la Senda de los Huertos desde sus inicios, llama la atención por su atípico nombre, algo que Pepe, su gerente, se toma con humor, ya que se trata, en gran parte, de una buena baza de “marketing”. Pocos son los locales donde la gente pase por su puerta y lo conozcan.

Perfectamente adaptado a los nuevos tiempos, con amplia terraza y con todas las medidas de seguridad para combatir la pandemia (no queda otra), “El Loco” hizo, hace y hará las delicias de nuestros jienenses, ya que cuentan con todo tipo de de tapas y platos variados, por ello no es fácil conseguir mesa para disfrutar de un refrigerio, por ejemplo, como receta inequívoca para combatir el calor veraniego de la capital.

Cargado de historia, “El Loco” ha recibido a la flor y nata de nuestra sociedad: políticos, empresarios, deportistas (lugar de encuentro y tertulia, desde siempre, para recibir a los futbolistas en sus salones), con la misma amabilidad que a los grupos de amigos y familiares que tienen marcado este icónico lugar para sus celebraciones y picoteo diario. Es parte del secreto de su éxito. Amabilidad, calidad y buen servicio no fallan.

Como breves reseñas culinarias, bien pueden destacarse, entre la variada selección de platos (de marcado estilo mediterráneo), como la carne a la piedra o sus exquisitos mariscos; es difícil quedarnos con uno, pues cuando se acude con cierta frecuencia y se catan sus “delicatessen”, cada día se descubre un nuevo sabor con que congratular el paladar; podemos afirmar que los comensales quedarán satisfechos, sin duda alguna.

Para las calurosas veladas estivales, “El Loco” tiene parte de la solución.