El Ayuntamiento de Martos ha participado este martes en la inauguración de la “Senda del recuerdo” de la Vía Verde del Aceite, una iniciativa promovida por la Diputación de Jaén con el objetivo de rendir homenaje a las personas fallecidas por la pandemia del Covid-19 en la provincia de Jaén. Esta Senda del Recuerdo, ubicada entre los municipios de Torredonjimeno y Torredelcampo, pretende perpetuar el recuerdo de estas personas a través del monumento permanente y vivo que representa un árbol.

“Hoy inauguramos la primera de estas sendas del recuerdo, la de la Vía Verde del Aceite, una vía que además está de celebración porque cumple su veinte aniversario en este año 2022. En ella se han plantado, hasta el momento, 249 árboles, cifra que se irá aumentando en los próximos meses hasta alcanzar los casi 300 ejemplares, ya que, por desgracia, esta pandemia sigue cobrándose vidas”, ha señalado el diputado de Agricultura, Ganadería, Medio Ambiente y Cambio Climático, Pedro Bruno, que ha estado acompañado en este acto por el segundo Teniente de Alcalde, Emilio Torres, además de por los alcaldes de Torredelcampo y Torredonjimeno, Javier Chica, y Manuel Anguita, respectivamente, así como por concejales de los ayuntamientos de Jaén y Alcaudete.

Junto a la plantación de árboles, que se realizó el pasado mes de marzo para conmemorar el Día Internacional de los Bosques, en este espacio se ha instalado un mural conmemorativo obra del artista jiennense José Ríos. “Está compuesto por 5 paneles con flores y juega con el anamorfismo, un efecto óptico donde la imagen deformada adquiere su forma natural al observarse desde un ángulo concreto”, ha explicado el diputado provincial, que ha adelantado que a lo largo del año se inaugurarán las sendas del recuerdo en las otras vías verdes dependientes de la Diputación, la del Guadalimar y la de Segura.

“En total, en las tres sendas del recuerdo se habrán plantado 481 árboles, en homenaje a todas y cada una de las víctimas de esta pandemia en los municipios por los que discurren estos antiguos trazados ferroviarios que hoy son senderos de vida, donde miles de personas caminan o practican deporte a diario”, ha indicado.

Las especies utilizadas en estos tramos de las vías verdes han sido el cinamomo o árbol del paraíso; el almez y la morera blanca, árboles que destacan por brindar abundantes y atractivas floraciones, un crecimiento rápido, la capacidad para proveer de una buena sombra o la producción de frutos comestibles para la fauna asociada a las vías verdes.